¿El silencio de Dios significa que ya no le importas? El autor Philip Yancey habla de algunas de las preguntas más difíciles de la vida.
entrevista realizada por Chris Laudes
Philip Yancey creció con el dolor. Huérfano de padre desde que era un bebé (su padre murió cuando él era un niño), Philip pasó su infancia y adolescencia en una iglesia que él describe como falta de amor y racista.
Cuando se convirtió en editor de Campus Life a sus 25 años, Philip tenía muchas preguntas y dudas acerca de su fe, y muchos de sus artículos lo reflejaron. Dichos artículos también mostraron una gran sensibilidad y preocupación por las personas en sufrimiento.
Pero Philip hizo más que escribir sobre el lado difícil de la fe. Buscó respuestas que buscan dirigir de nuevo al amor de Dios. También comenzó a escribir libros. Mientras fungía como editor del Campus Life , comenzó la investigación para su primer libro importante, ¿dónde está Dios cuando hay sufrimieno? (Zondervan). Cuando Philip dejó Campus life para escribir libros a tiempo completo, continuó escribiendo sobre la parte más dura de la fe, pero siempre con un corazón comprensivo y con la vista puesta en un Dios que permanece en amor y cuida a las personas a pesar de las dificultades de la vida.
El libro de Philip Reaching for the Invisible God (Zondervan) es otra mirada honesta y sensible a la fe y la duda. Hablamos con philip sobre el libro, para pedirle que nos ayude a comprender mejor lo que significa vivir para Dios, incluso cuando los tiempos son difíciles.
¿Cuáles son las principales razones por las que las personas tienen dudas acerca de Dios?
Creo que a menudo tienen dificultades con estas grandes preguntas. ¿Por qué existe el mal y el sufrimiento en el mundo? ¿Por qué Dios condena a sinceros musulmanes, hindúes y los creyentes de otras religiones no cristianas? También hay preguntas acerca de la hipocresía. ¿Por qué los cristianos no siempre actúan como cristianos?
Francamente, creo que estas preguntas a veces enmascaran preguntas más personales que salen de nuestras propias experiencias difíciles. Piense en una persona que ora como loco por algo realmente importante, pero no obtiene respuesta. Este tipo va a tener serias dudas acerca de su fe.
Parece que nuestras dudas y preguntas vienen a veces porque Dios no actúa de la manera que esperamos que lo haga.
Basta con pensar en estas líneas de un antiguo himno: "Vengo al jardín solamente cuando el rocío está todavía en las rosas Y camina conmigo, y habla conmigo, y él me dice que soy el suyo propio.". Bueno, eso no pasa conmigo. Dios no camina conmigo y habla conmigo en el camino que implica la canción. ¡Yo no voy a pasar mis días paseando con Dios en un hermoso jardín de rosas! Lo mismo puede decirse de muchas de las canciones de alabanza de hoy en día, que son como canciones de amor a Jesús. Pero ese tipo de intimidad a menudo simplemente no está allí.
¿Cómo obtenemos una visión más realista de Dios?
No debemos exagerar el lado "emocional" de la fe. A menudo hablamos mucho sobre los sentimientos y experiencias que simplemente no son tan comunes. Ahora no me malinterpreten. La primera vez que viene a Cristo, puede experimentar una intimidad especial con Dios. Este es un tiempo muy valioso para el nuevo cristiano. Pero es peligroso pensar que este sentimiento de cercanía siempre estará ahí.
En mi libro, La decepción con Dios , me refiero al hecho de que los hijos de Israel habían clamado por 400 años, mientras vivían como esclavos en Egipto. Aquí está una nación, pueblo escogido de Dios, gritando, gritando, gritando: ". Somos esclavos, por amor de Dios ¿No se preocupa por nosotros?" Y no pasa nada. Generación tras generación nació, vivió y murió. Todos ellos habían oído historias sobre el poder de Dios, pero nunca lo vieron. Y, finalmente, Dios actuó. Se rompió el silencio y leemos todo acerca de las 10 plagas, el retroceso del Mar Rojo, y todos los milagros que Dios realizó mientras los israelitas vagaron por el desierto. Se habla mucho de las lecciones de la Biblia sobre la base de los milagros en Éxodo, pero rara vez oímos hablar de esos 400 años, cuando Dios parecía silencioso.
En la Biblia, Dios a veces responde de manera real y directa, milagrosamente, y a veces no lo hace. No sé por qué Dios funciona de esta manera. Es desconcertante. Pero creo que es importante entender que no estamos contando toda la historia si sólo estamos hablando de un lado.
¿Cómo manejamos esos tiempos, cuando la evidencia en nuestras vidas parece gritar que Dios lo es todo para nosotros , y sin embargo parece ser malvado y cruel?
Mira Job perdió casi todo. Dios pareció estar en silencio durante un tiempo muy largo. Su mujer se acercó a él y le dijo algo así: "¡Basta con mirar lo que está pasando!, con un amigo como Dios, ¿quién necesita enemigos? maldice a Dios y muérete". Ahora, mirando la evidencia, Job podría haber llegado fácilmente a la misma conclusión que su esposa había llegado. Él podría haber decidido que Dios era cruel, sádico y no le agradaba. Pero en última instancia, eligió creer que lo que sabía acerca de Dios era verdad y se mantuvo fiel no importando la situación que vivía. Él optó por creer que Dios era digno de confianza.
Pero Job seguía luchando. Tenía muchas preguntas y dudas. También tenía una gran cantidad de ira, y él no tenía miedo de expresarlo.
Job desde luego sabía que Dios conocía sus sentimientos. Hablamos de la paciencia de Job. Era más bien como la arrogancia de Job pero todavía no se rindía a Dios y Dios no renunció a él. De hecho, Dios dijo que Job era un hombre justo.
Es importante darse cuenta de que Dios no se sorprende o molesta por cualquier pregunta que se le haga. No se sorprende o molesta por las dudas que tengas. Y no se desanima si nos enojamos con Él, como lo hizo Job. Si Dios no tiene miedo de escuchar preguntas dolorosas, si Él no tiene miedo de nuestras dudas, entonces ciertamente no debemos tener miedo de que oiga las nuestras. Y no hay que tener miedo de dejar que los demás expresen sus preguntas, sus luchas y sus dudas. De hecho, debemos tratar de hacer que los grupos de jóvenes sean un lugar seguro para los escépticos. Tenemos que ofrecer "compañeros de duda" para los que están dispuestos a admitir que están luchando y tiene preguntas acerca de la fe y Dios.
¿Qué quiere decir con "compañeros de duda"?
Las personas que no te castigan por ser honesto acerca de lo que realmente está pasando en su vida. Ellos no tratan de resolver todos los problemas. Ellos no tratan de hacer que usted piense exactamente como ellos piensan. Un compañero de duda es una persona que es simpática, no crítica, y tampoco se pierde en sus propias dudas. Míralo así. Tenemos estos ríos salvajes a cabo aquí en Colorado donde vivo. Digamos que usted ha caído en este río y que está siendo abofeteado en rápidos y chocó contra una roca. Es necesario un compañero para ayudarle a salir del río. Pero usted no quiere que su acompañante le ayude porque también está atrapado en los rápidos. Se necesita un compañero que está de pie en la orilla, que esté pronto y dispuesta a celebrar su salvación.
Un compañero de duda sabe lo que es tener dudas y luchas, pero ahora está de pie en un terreno bastante sólido. Podría ser su pastor de jóvenes o un líder de un club cristiano como Campus Vida, Young Life o Asociación de Atletas Cristianos. Simplemente tiene que ser alguien que es empático, sin embargo, está de pie en la orilla.
La vida sería mucho más fácil si fuera de alguna manera "a prueba de dudas" nuestra fe, ¿no es así?
Puede parecer de esa manera. Pero no puedo evitar pensar en una de las primeras historias que escribí para la revista Campus Vida. Se trataba de una joven de 17 años de edad, de Maryland, que una vez tuvo la oportunidad de competir en los Juegos Olímpicos. Pero eso fue antes de un accidente de buceo que la dejó paralizada. Durante mi entrevista con ella, me dijo: "Philip, que no se dan cuenta de lo increíblemente humillante que es esto. No puedo ir al baño sola. Ni siquiera puedo llorar por mí misma. Alguien tiene que limpiar mis ojos con pañuelos de papel. no puedo vestirme. ¡No puedo enfrentar el resto de mi vida de esta manera!"
Hoy en día, muchos años después, la gente de todo el mundo sabe acerca de Joni Erickson Tada. Ha ayudado e inspirado a millones con sus libros, charlas y obras de arte. Hace algún tiempo, la vi de nuevo y ella dijo: "Philip, yo tendría que decir lo que pasó cuando me zambullí en la Bahía de Chesapeake y me rompí el cuello era lo más grande que me ha pasado. Dios usó esa experiencia para lograr tanto . El día en que quería borrar de mi vida mi experiencia fue el día en que abrió el camino a tanto bien ".
Increíble ejemplo. Y mientras que la mayoría de nosotros no va a experimentar por lo que pasó Joni, todavía nos enfrentamos a tiempos difíciles. ¿Cuál es la verdad más importante a la que debemos aferrarnos cuando la vida se pone difícil?
Me gustaría comenzar con una pregunta: ¿Dios es un Dios bueno y digno de nuestra confianza? Para mí esa es la pregunta fundamental. Si no es así, entonces cuélgalo. Si Dios es bueno y digno de nuestra confianza, entonces aférrate a Él, incluso cuando la evidencia parece apilada en sentido contrario.
Considere este ejemplo. Digamos que su experiencia con un amigo en particular ha demostrado que él es confiable, responsable, cariñoso y digno de confianza. Ahora bien, este mismo amigo se compromete a cumplir con usted en Starbucks. Él dijo que iba a estar allí antes de las 10:30. Pero a las 10:40, todavía no está presente. A las 10:50, todavía no está presente. Cuando llegan las 11:00 todavía no ha entrado por la puerta. ¿No cree automáticamente, qué idiota, insensible, irresponsable? . Por supuesto que no. Usted conoce a su amigo, que confía en él. Claro, usted está irritado y siente que está perdiendo el tiempo. Pero lo más probable, hay una buena razón por la que esa tarde no estuvo allí . Podría ser un pinchazo, un accidente, una emergencia familiar. El hecho de que él no estuviera allí no significa que es irresponsable, indiferente o insensible.
Esa es la forma en que debe estar con Dios. Una vez más, piense en Job. La evidencia indicaría que Dios era irresponsable, indiferente, sin amor. Pero Job conocía el carácter de Dios y supo que algo no encajaba. A pesar de la forma en que las cosas se veían, Job eligió confiar en Dios.
En su libro usted dice, "he aprendido a confiar en Dios con mis dudas al conocer a Jesús." Hable sobre el papel que Jesús juega en ayudar a lidiar con sus dudas.
En una sección del libro que estoy señalando, me refiero a esta gran lupa que utilizo para leer la letra muy pequeña en el Diccionario Oxford de Inglés . La impresión es tan pequeña que no hay forma en que pueda leerlo sin una lupa. He aprendido mucho acerca de lentes de aumento por buscar palabras en mi diccionario. He aprendido que lo que aparece en el centro del cristal es muy nítido y claro. Pero cuando se mira lejos de este "centro focal" la impresión se vuelve más difusa. Ahora me gusta pensar en mi fe en Jesús como el "centro de coordinación". Las partes difusas de la imagen ampliada representan mis dudas y preguntas sin respuesta. Cuando muevo los ojos de esas dudas y miro a Jesús, la vida se vuelve más clara, más centrada.
Cuando miro a Jesús, veo a alguien que se esforzó y experimentó mucho dolor. Cuando estoy mirando a Jesús, veo a alguien que entiende todo lo que estoy pasando. Cuando miro a Jesús, veo a alguien que me ama más de lo que jamás podría comprender. Mientras que mantengo los ojos centrados en Él, no tengo que tener miedo de mis dudas. Puedo creer que Dios me verá a través de ellas.
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